'En 2014 se recibieron 1688 nuevas tecnologías (NTRs), se solicitaron 143 nuevas patentes, se formalizaron 42 nuevas licencias de patentes y 1675 acuerdos de uso de software.'
Esto es la diferencia entre la producción española y la extranjera, va Berlanga y hace Calabuch y no deja más que una burbuja inmobiliaria, van los extranjeros y sudan y evacuan riqueza por los costados. #3 Menuda anexión le metía yo (a la Loren, el Charlton para Ucrania)
España nunca estuvo "diez años por delante", eran caprichos de nuevo rico y como tales los veían. Esto es lo que es Hispanistán, le guste o no a la gente, y si no le gusta, ya sabe: a cambiar.
Si fuera la época Gates o Ballmer sería para preocuparse en serio. Ahora mismo, con Nadella parece que las cosas han cambiado y que es más abierto a llevarse bien con el resto de jugadores. Que no digo que Windows 11 vaya a ir sobre Linux, pero menos ceporro que Ballmer lo es un rato largo.
Con mis experiencias anteriores, puedo asegurar que esas oficinas ahora mismo parecerán más una horda mongola que otra cosa, con 100 ingenieros que acaban de llegar, pero no saben para qué.
Hace mucho, muchísimo tiempo, todos los gallos en China tenían cuernos. Unos cuernos largos y afilados que les daban un aspecto terrible.Cierto día un dragón que volaba por encima de un pueblo, vio auno de estos gallos y decidió bajar para hablar con él.
-Buenos días, señor gallo.
-Buenos días, señor dragón.
-Señor gallo, tiene usted unos cuernos preciosos -dijo el dragón- ¿Puede prestármelos? Seguro que así todos me respetarán y nunca más se reirán de mí.
El gallo dudó y consultó a su amiga la lombriz. La lombriz le dijo que se los dejara y le aseguró que el dragón se los devolvería. Así lo hizo el gallo, y el dragón, en cuanto tuvo los cuernos sobre su cabeza echó a volar y se perdió en el cielo. El gallo esperó a que el dragón volviera, pero el dragón no regresó ni aquel día, ni al siguiente, ni nunca jamás.
Como castigo el gallo, enfadadísimo, se comió a la lombriz. Y desde aquel día los gallos comen lombrices. Ahora, todas las mañanas los gallos lanzan al cielo un kikirikí, que en el lenguaje de los gallos quiere decir:
“Dragón, devuélveme mis cuernos”
Conocía esta historia de pequeño y al ver el meneo la he recordado, buscado y encontrado.
No hay que olvidar que todo esto es gracias a las politicas antidroga de nuestro gobierno, politica que nunca a conseguido resultados mas alla de llenar los bolsillos a ciertos politicos, empresaurios y banqueros...
Creo recordar haber leído que Marte no tiene gravedad suficiente como para retener una atmósfera y todos los estudios sobre terraformación que se han hecho han dado por sentado que más tarde o más temprano cualquier atmósfera que se generase terminaría escapando al espacio.
Eso sin tener en cuenta que Marte tampoco tiene ionosfera, o al menos una ionosfera generada por el nucleo del planeta con la suficiente "potencia" como para servir de escudo a la radiación del sol y a la radiación cósmica, con lo que toda vida que se crease quedaría muy expuesta.
O lo que es lo mismo: en Marte podríamos contruir una casa parecida a la tierra, pero solo podríamos estar allí un tiempo. Bueno, es cierto que bajo tierra podríamos sobrevivir pero en si tenemos que hacerlo en esas condiciones podríamos quedarnos en nuestro querido, viejo y vapuleado planeta.
...después de 8 años de experiencia en EEUU en IT no se por donde empezar, personalmente hay demasiadas diferencias... sin embargo y centrándose en la comparativa con España me sorprende especialmente algo: diversidad; la capacidad que tiene EEUU de atraer talento de fuera y convertirlos en clase media acomodada sin complejos en poco tiempo.
En España no hay apenas i+d.
- Las pymes son demasiado pequeñas para abordar un gasto en personal dedicado a ello, crear prototipos, etc.
- Las universidades son un pozo de autofeladores endogámicos, y los pocos avances que hacen se quedan en las estanterías. Allí los proyectos sólo valen para llevarse medallas o llevárselo muerto, salvo honrosas excepciones.
- Además de que tenemos pocas grandes empresas, éstas básicamente se adaptan a los avances cuando no les queda más remedio, cuando temen la competencia extranjera, pero realmente no innovan nada.