En 1956, un borracho realizó una apuesta en un bar de Manhattan. Apostó que podría volver desde New Jersey en 15 minutos. Robó un avión en New Jersey y lo aterrizó en la calle St. Nichols que tenía farolas y coches aparcados en ambos lados (en vez de hacerlo en un patio de una escuela como había planeado). El dueño del avión no presentó cargos, y se le multó con 100$ por incumplir la normativa que prohíbe aterrizar en Manhattan. 2 años despues volvió a hacer lo mismo cuando un hombre del bar le dijo que no se creía la historia.
|
etiquetas: borracho , robo , avión , manhattan , aterrizar , bar , 1956