Hay algo coherente en que quien ha sido fascista, socialista y comunista acabe siendo desalojado por okupa. Al final uno ya no sabe ni dónde está el portal de casa. Esa transición permanente de Jorge Verstrynge le ha permitido identificar el mal y el bien de muy variadas formas. Las conversiones ideológicas no se miden tanto por dónde esté uno sino por quién tiene enfrente, y Verstrynge ha tenido enfrente a todo el mundo. De hecho, en épocas de sedentarismo, vuelve a Tánger para darse el lujo de tener enfrente directamente a Europa.
|
etiquetas: verstrynge , okupas , itinerancia ideológica