El gris inhóspito de una zona industrial de Brooklyn convertido en una colorida zona de chapuzones contra el calor. La toalla en la mano, en lugar de la bolsa de basura. El objetivo: zambullirse en un contenedor. El concepto es sencillo, afirma Jocko Weyland: "No hay muchos sitios en los que nadar en Nueva York. En cambio, los contenedores están por todas partes".
|
etiquetas: chapuzón , contenedor