El Tribunal General de la UE ha ordenado suspender la prohibición de los productos derivados de focas, justo antes de que entrara en vigor un reglamento sobre esta materia hoy viernes. La suspensión fue pedida por una organización Inuit de Canadá, a pesar de que la prohibición contiene una excepción para los Inuit. Alegan que la prohibición, al afectar al comercio, les afecta a ellos también. La Comisión Europea, sorprendida, espera la notificación del tribunal para decidir una respuesta.
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