El discurso que Benedicto XVI pronunció en Regensburg es esencialmente un ataque al laicismo europeo y una petición urgente de reestablecer una doctrina y una práctica completamente católicas en Europa. Se puede ver como una manera de consolidar a Europa frente a un enemigo y, por consiguiente, de animar a todos los cristianos a hacer hincapié en sus raíces cristianas. Parece que para consolidar la base europea estaba dispuesto al riesgo de suscitar la ira islámica.
|
etiquetas: papa , cristianismo , benedicto