“Avenida Elena, 18 calle, apúrese”, grita el ayudante de un bus en la capital. La mayoría de “camionetas” (así es como llaman a los autobuses) están en precarias condiciones. Van atestadas de gente y expulsan un humo denso y negro que inunda la ciudad. Lo único bueno es el precio, 10 céntimos de euro.
|
etiquetas: actualidad , guatemala