Paula es cajera de supermercado desde hace 7 años. Entró en este mundo cuando tuvo a su hija, con apenas 19 años. Desde entonces, ha pasado por cuatro supermercados diferentes y en el último lleva 3 años. Cada mes, la empresa para la que trabaja le ingresa un total de 913 € netos, un salario que no le permite alquilar una casa y mantener a su hija de 6 años. Por eso, Paula vive en un piso de 2 habitaciones, una cocina y un baño que comparte con otra familia en el barrio de Oporto (Madrid).
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