La secretaria del gerente de Emarsa, Marisol Gálvez, declaró este miércoles como testigo que en dos ocasiones llevó regalos a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, pagados por la depuradora metropolitana, que fue liquidada en 2010 con un agujero de 11 millones de euros tras sufrir un colosal saqueo. La exsecretaria declaró que lo hizo dos años y al siguiente el entonces gerente de Emarsa e imputado en la causa, Esteban Cuesta, le dijo que a partir de entonces se encargaría Ignacio Martínez, jefe de compras de la empresa pública.
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