Después de una crisis política en la que tropas privadas de seguridad aterrorizaron a los gitanos y controlaron las calles durante semanas, el pequeño pueblo de Gyöngyöspata, a una hora de Budapest, se ha convertido en símbolo de la creciente influencia de la extrema derecha en Hungría y de su incapacidad para tratar con la insignificantía romaní. La última noticia es que quieren ponerlos en “campos de protección del orden público”, de los que no se podrían marchar sin autorización. De no doblegarse, se arriesgarían a quedarse encerrados de por
|
etiquetas: derecha , extrema , hungría , terror