No hay duda de que la crisis de las tarjetas gráficas ya ha llegado a su fin. Es cierto que los precios han bajado mucho en general, aunque los de algunos modelos todavía siguen inflados, y esto ya no se debe a un problema de stock ni a una demanda anormalmente elevada, sino más bien a un intento por parte del canal minorista de seguir haciendo caja agarrándose a un problema que ya no existe.
|
etiquetas: targetas gráficas , precio