Registrar una versión de una obra musical que pertenece al folclore está permitido por la Ley de Propiedad Intelectual. Pero inscribirse como autor de una obra de origen anónimo es otra cosa. Y es esto lo que está sucediendo en la SGAE, donde aparecen piezas anónimas registradas, no como versión o adaptación, sino en calidad de autor original, por personas del siglo XX. Toma ya.
|
etiquetas: medieval , música , sgae , derechos , autor