Un equipo de científicos del Imperial College London y la University of South Australia han dado un gran paso en la detección del autismo, al descubrir que la orina de los autistas tiene un "firma química" distinta al resto de las personas. Para que tengan idea de lo esparcido que es el autismo en el mundo, tan solo en el Reino Unido (en donde se originó el estudio), 1 de cada 100 personas es autista. Vía (en castellano)
eliax.com/index.cfm?post_id=7799