El socialista Casimiro Curbelo logra que se imputen cuatro delitos a los tres agentes que le detuvieron en julio de 2011 tras un escándalo en un puticlub, según ha podido saber LA GACETA. El ex senador socialista Casimiro Curbelo lleva 30 años viviendo de la política. Desde su tierra natal, donde se le apoda Curbelone, El Papi o Dios, se le respeta –se le teme, según la oposición local– y pasa por ser uno de los barones más veteranos del socialismo canario.
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