La alarma social sobre la okupación en plena crisis del coronavirus, que para muchos juristas está injustificada, está disparando el negocio de esta empresa, que en los últimos meses ha desplegado agresivas campañas de publicidad, y de otras como Prosegur, que en febrero cerró la venta del 50% de su negocio de alarmas a Telefónica.
|
etiquetas: alarma , okupación , securitas