Rusia ha anunciado que va a construir una pequeña nave en un proyecto de 2.000 millones de dólares para destruir la basura espacial que órbita la Tierra. Más específicamente, va a hacer que 600 satélites que no están funcionado modifiquen su órbita y caigan a la Tierra, donde terminarán en los océanos o se quemarán por completo al ingresar al planeta. Estaría lista para el año 2020. Su trabajo comenzaría en el 2023 y contaría con una vida útil de 15 años. Además, va a funcionar con un núcleo de energía nuclear. En español:
goo.gl/6dZ4K