El nuevo Michael J. Fox, enfermo de Parkinson, recién nacionalizado estadounidense y combativo contra el sector más conservador de su propio nuevo país, ha de inspirarnos a todos tanto como nos inspiraba el jovencito que jugaba baloncesto disfrazado de hombre lobo. Claro está que todos hemos cambiado. El artículo es una traducción de la entrevista concedida por Michael J. Fox a la revista Esquire.
|
etiquetas: humanismo , eeuu , michaeljfox