La Unión Europea ha puesto en el punto de mira los sueldos de los altos ejecutivos por su influencia en el agravamiento de la crisis financiera internacional. El Eurogrupo, que reúne a los ministros de Economía de la zona euro, analizará el próximo martes, en qué medida la remuneración de los directivos, en función de los beneficios a corto plazo, "puede contribuir a la adopción de riesgos desproporcionados" y al desequilibrio del sistema financiero. Varios países europeos están preparando medidas contra los pluses y primas supermillonarias.
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