Se trata sin duda de toda una anécdota digna de ser narrada. La cuestión es que Nightmare Busters estaba en desarrollo en la época de Super Nintendo, pero por un razón o por otra, su distribuidora, Nichibutzu, decidió que el juego no vería la luz del sol. El juego estaba siendo desarrollado por Super Fight Team, cuyos miembros originales decidieron retomar el proyecto donde lo habían dejado, acabar este clon de Spin Master y publicarlo en pleno 2013. Y así ha sido. En la página web del estudio podéis ver unas cuantas capturas del susodicho.
|
etiquetas: videojuegos , consolas , super nintendo , retro