Una aproximación, como muchas otras, en la misma línea, de cómo tendríamos que enfocar la solución a los problemas que más nos agobian, el paro, la vivienda, la sanidad, la educación, en definitiva el no aceptar el dèjá vu que estamos viviendo, en una regresión que nunca habíamos imaginado. Ésta no es más que una más, una queja al viento, un granito de trigo que sumado a muchos otros espera un día convertirse en pan para todos.
|
etiquetas: economía , dignidad , libertad 
