Azulones, cercetas, silbones, rabudos, cucharas, frisos y colorados. Estas son sólo algunas de las especies de anátidas, los patos, que por estas fechas, con el invierno ya a la vista y finalizado el periodo migratorio, se reparten por el rosario de lagunas que forman la llamada Mancha Húmeda. Una aparente contradicción, islas de agua dentro de la otra Mancha, la que a nadie se le ocurre llamar “seca” porque sería una redundancia.
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