El uso de la inmigración está reportando al PP la recuperación del electorado más extremista y que no votaba a nadie por tibios o lo hacia a grupos de extrema derecha. La actitud de Zapatero obviando la realidad económica no está ayudando a parar la sangría de abstencionistas de centro izquierda que ven como nadie les habla de sus problemas reales, de momento lo hace Rajoy y mezclado con la delirante cantinela xenófoba y radical de su mundo sin camareros negros.
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