Rasgos anatómicos del cuerpo humano que no sirven para nada o para casi nada. Muchos de ellos ya identificados por Darwin en El descenso del hombre (1871). La ciencia todvía no puede ofrecer una explicación completa por la que algunos rasgos anatómicos obsoletos persisten en nuestro acervo genético y otros, sin embargo, desparecen. Son los llamados órganos vestigiales. Órganos cuya función original se ha perdido durante la evolución. En 1893, Robert Wiedersheim publicó una lista de 86 órganos humanos de los que se desconocía su función. +info
|
etiquetas: cuerpo , curiosidades