La Junta Vecinal decidió hace un mes instalar un parque en un terreno lindero de la iglesia con un dinero dispuesto por el Ayuntamiento. El párroco se opuso desde el primer momento a esta remodelación alegando que el titular del terreno es la parroquia. Tras realizar las consultas pertinentes en el catastro y en el Plan de Urbanismo de la localidad, la Junta Vecinal determinó que la superficie pertenece al pueblo. «El Obispado entendió que allí no tenían nada», afirma la vocal de la Junta Vecinal.
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