Tras entregarle su permiso de conducir al guardia civil que se lo había solicitado, antes de realizar la prueba de alcoholemia, el conductor arrancó el coche y huyó a toda velocidad. A la mañana siguiente, dicho conductor se personó en el puesto de la Guardia Civil de Punta Umbría, donde denunció la pérdida de su permiso de conducir para poder así renovarlo.
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