Habida cuenta de que cada vez más productos usan nanopartículas de plata por sus efectos bactericidas, como pueden ser los calcetines "sin olor", desodorantes y jabones, Benjamin Colman de la Duke University in Durham (EEUU) y su equipo han realizado un experimento que demuestra que el aumento de estas partículas en el medio ambiente puede agravar el cambio climático. Las partículas que pasan al agua y al ambiente tras lavados y duchas siguen atacando a las bacterias y éstas producen oxido nitroso, un gas que produce efecto invernadero.
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