¿Recuerdan los experimentos de Química de electrolisis, en los que se sumergía en ácido sulfúrico un pedazo de aluminio y uno de cobre unidos con cables a una batería? Pues resulta que el nuevo buque de guerra de la Armada de los EEUU, el USS Independence, sufre de algo llamado "corrosión galvánica". Ocurre debido a que las carcasas de las turbinas del buque, que están hechas de acero, están en contacto con el casco, que es de aluminio. Agreguen agua salada, la corriente eléctrica que circula por las turbinas y ¡presto!
|
etiquetas: tecnología , armamento , fail