A día de hoy parece innegable que la crisis que sufre la sociedad española desde hace aproximadamente cinco años va mucho más allá del ámbito estrictamente económico. Resulta sorprendente como gran parte de la inteligentsia política y económica parece haber tardado tanto en comprender esto. El problema español (y muy probablemente también el europeo) no se debe únicamente a ciertos desequilibrios e irregularidades en su sector financiero y seguramente no conseguirá resolverse atendiendo a criterios técnicos que no vayan más allá de estos.
|
etiquetas: crisis , democracia , cambio , politica