"Los monos tití prefieren el silencio a Mozart. Y no responden emocionalmente a la música humana. Pero si la música se basaba en el tono, el ritmo y el tempo de sus propias llamadas, descubrieron que esa música afectaba significativamente su comportamiento y respondían con emociones a ella. De hecho, la música de los monos tiene sonidos agudos y desagradables para el oído humano. Los animales no están interesados en la música humana y sí lo están si la música se ha adaptado específicamente a los tipos de sonidos a que están acostumbrados."
|
etiquetas: zoología , monostití , primates , sentido musical