El padre Jim Borst, un misionero holandés, debe abandonar la India a finales de julio por una orden del gobierno de Jammu-Cachemira. La envidia de los musulmanes está en el origen de esta medida, dado que consideran que sus escuelas son “demasiado buenas”. Hubo una campaña sistemática no sólo de calumnias sino de terror contra el padre Borst cuando los terroristas atacaron su institucion educativa Escuela del Buen Pastor, en Pulwama, en dos ocasiones en 2003.
|
etiquetas: internacional , india , educación