Los gestos y estados de ánimo compartidos llevan a que los rasgos faciales se asemejen con el paso del tiempo. No es una idea loca o una simple intuición. Que de tanto convivir las parejas se van pareciendo, se van mimetizando. Un hecho que para muchos no pasaba de ser un absurdo, pero que ha ido ganando respaldo científico. Desde los años 90 se conoce la existencia de las llamadas neuronas espejo, grupo de células nerviosas que se activan cuando una persona realiza una acción o cuando observa a otra realizando una actividad.
|
etiquetas: mimetismo , parejas , asemejan , años