El Banco Central Europeo (BCE) dio ayer el pistoletazo de salida a su plan de compra de activos que tiene como principal objetivo la reactivación del crédito. En total, adquirirá 60.000 millones de euros de covered bonds (conocidos en España como cédulas), importe que ayer el miembro del consejo, Ewald Nowotny, calificó de “suficiente”. Esta deuda cuenta con el respaldo de créditos hipotecarios o préstamos al sector público y la medida estará vigente hasta el 30 de junio de 2010.
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