Entre 1991 y 2000, William Pickard fabricó millones de dosis de LSD, cuidadosamente impregnados en secantes, convirtiéndose, por arte de birli-birloke en tripis. Pickard era un químico con un currículum impactante: había sido director del Programa de Investigación de Drogas de Los Angeles y director de investigación de la Universidad de Berkeley, en San Francisco, epicentro del movimiento psicodélico en EEUU y, por ende, en el mundo. Pickard veía el ácido como el sacramento de una religión y “ofrecía plegarias cada vez que cocinaba una remesa”.
|
etiquetas: william pickard , lsd , los angeles , berkeley , gatos freddy , panoramix