Jack Tindall, de 96 años, fue acusado de asesinar a su mujer de 92 años (con la que llevaba casado 68 años) y com demencia en Nottingham (RU) en agosto del año pasado. El motivo fue, explica, que su esposa "le suplicó que la matase si la amaba tanto como ella le ama a él". "La estrangulé - son las cosas que uno hace por amor" - declara. Al parecer estas súplicas fueron entreoídas por sus nietos. El incidente se resuelve después de haberse convertido en una de las personas más ancianas acusadas de homicidio en el Reino Unido.
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