Los hogares españoles debían una media de 5.896 euros en créditos al consumo -para la financiación de coches, vacaciones, electrodomésticos, etcétera- al cierre del año pasado, un 19,3% más que doce meses antes, situándose en el tercer lugar de Europa, todavía a gran distancia de los británicos (10.675 euros) pero rozando ya a los alemanes (5.995 euros). Resalta, en cualquier caso, que los préstamos para consumo sólo representan entre un 12% y un 15% de la deuda total de las familias nacionales, mientras que el resto corresponde a hipotecas.
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