Pero, ante nuestra estupefacción, hemos podido comprobar que, en el breve espacio transcurrido desde entonces, se ha producido una “intervención” cuyo resultado es el que se ofrece en esta otra imagen. Por increíble que pueda parecer, esto es lo que queda del trabajo de un artista del que, todavía, existen familiares en nuestra ciudad. Ignoramos si este incalificable hecho tiene solución, pero de lo que no cabe la menor duda es que alguien deberá adoptar las medidas precisas para que no se repitan actuaciones como ésta.
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