Cuando un trabajador cambia de trabajo o, aún peor, se queda sin empleo y pasa a cobrar la prestación, Hacienda, en una norma absurda, considera que al recibir dinero de dos pagadores (el INEM consta como otro pagador) el mínimo exento debe bajar de 22.000€ a 11.200€ (la horquilla donde estamos casi todos). Cuando trabajaba en la empresa, estaba exento. Cuando cambia de trabajo o pierde el empleo, tiene que pagar. En este caso, una mensualidad entera del subsidio de desempleo. ¿Dónde está la lógica? ¿Dónde, la justicia?
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