El decreto de reforma laboral que hoy tiene previsto aprobar el Gobierno incluirá, como principal novedad, la posibilidad de que las empresas puedan alegar la previsión de dificultades futuras para realizar despidos por causas objetivas. Además, según fuentes cercanas a la negociación, la nueva regulación dejaría fuera del ámbito judicial la decisión sobre el asunto. En el caso del despido por causas objetivas o económicas, la indemnización del trabajador pasa a ser de 20 días por año trabajado en lugar de los 45 del despido improcedente.
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