Las empresas que repartan dividendo entre los accionistas deberán distribuirlo también entre los empleados. Es la base de la medida que el Gobierno francés quiere aprobar y que desde el 8 de noviembre está en la mesa de negociación con el diálogo social. Es una promesa electoral de Macron que esperan aprobar en los próximos cincos años. Los trabajadores franceses ya están amparados por otros mecanismos, como el reparto de beneficios, condicionado a los resultados de la empresa, la participación, obligatoria en empresas de más de 50 empleados.
|
etiquetas: francia , dividendos , empleados , reparto , macron