Ford confirmó hoy que va a cambiar de forma radical su línea de productos en Norteamérica, con la introducción de vehículos europeos, para responder a la caída de las ventas en Estados Unidos y los elevados precios de la gasolina. Uno de los puntos centrales de la nueva estrategia de Ford para el mercado estadounidense es la introducción de seis pequeños autos europeos y la transformación de tres plantas norteamericanas que dejarán de producir todo terrenos y "pickup" para empezar a montar en los próximos años autos de reducidas dimensiones.
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