Se alterna lo mala que es la industria y como nos va a salvar la alimentación natural y la agricultura ecológica, pasamos a temas mucho más serios, como la cura del cáncer y el SIDA con remedios naturales o el uso de dióxido de cloro (ClO2), un poderoso desinfectante industrial empleado para la limpieza de conductos de ventilación contra la legionela, o en plantas potabilizadoras de agua, como remedio para la cura de prácticamente todas las enfermedades del mundo tal y como se puede ver en la página de su “descubridor” Jim Humble.
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