El gobierno de Japón pretende condenar hasta 10 años de prisión a dos activistas de Greenpeace, Junichi Sato y Toru Suzuki, por denunciar el contrabando de carne de ballena y luchar por poner fin al programa de caza "científica" japonés. Si defender a las ballenas es un crimen, todos los que apoyamos que se termine con matanza de estos animales somos cómplices de las acciones de Junichi y Toru. Exigí al Gobierno de Japón que libere a los activistas o de lo contrario que arreste a todos los que queremos salvar a las ballenas.Ya firmaron + d 4000
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