El fin de la extorsión del impuesto revolucionario y la catarata de detenciones policiales ha dejado a ETA en mínimos históricos. Los apenas 50 terroristas que quedan en activo y en libertad, según fuentes de la lucha antiterrorista, se están viendo obligados a hacer economía de crisis ante el desplome de sus ingresos. ETA vive ahora de los ahorros y de las llamadas "aportaciones voluntarias" de quienes simpatizan con ella.
|
etiquetas: eta , militantes , tregua