El Monasterio de Alcobaça fue construido a mediados del siglo XII. La construcción se sitúa en un enclave único, en la parte central de Portugal, rodeado por los ríos de Alcoa y Baça, lo que le convierte en uno de los monasterios más ricos de la ciudad. Los monjes de este monasterio no tenían escasez de ningún tipo y, además, llevaban una vida de lo más sosegada y relajada, tanto que comenzaron a ser los más orondos de la región. Por este motivo, se tuvo que aplicar una solución drástica y decisiva para acabar con este “problema".
|
etiquetas: historia , portugal , monjes , alcobaça