Un reconocido fotógrafo australiano, Bill Henson, vio cómo se le cerraba una exposición en Sídney porque incluía imágenes de adolescentes semidesnudos. Enfrentado a una denuncia por pornografía infantil, su trabajo fue tachado de «repugnante» por el primer ministro, Kevin Rudd, y solo pudo respirar tranquilo cuando un grupo de cincuenta destacados artistas locales -con la oscarizada Cate Blanchett a la cabeza- intervino para recordar que el arte no puede tener límites.
|
etiquetas: desnudo , infantil , bill henson , sidney