Los residentes de Malibú votan en contra de una propuesta de pagar más impuestos para financiar a más bomberos, y en su lugar dirigen su ira contra los funcionarios de emergencia que, según dicen, no lograron salvar sus hogares. Y la ciudad de Paradise rechaza una serie de propuestas baratas y efectivas para ayudar a prevenir más tragedias, evitando soluciones tan simples como una ley que requiere cinco pies (1.5 metros) de "espacio defendible" que debe limpiarse de vegetación alrededor de las casas. Traducción
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