"Dios no es sordo, recen en voz baja, respeten el sueño de los otros, respeten la ley", indica el encabezado del sitio en el cual Leandro Galassi.Cansado de la contaminación acústica de un templo evangélico situado junto a su casa, un brasileño dedicado a la informática creó en Internet un sitio llamado "¡Dios no es sordo!", visitado cada día por cientos de personas que manifiestan su solidaridad.
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