Diez clientes y el dueño del bar permanecieron encerrados toda la noche del viernes al sábado en un establecimiento situado en la calle Carmelo de Delicias, después de que la Policía Municipal tras escuchar ruidos a alto volumen, advirtiera a las 1.30 horas desde el exterior, que había sobrepasado el límite de cierre de la una. En una maniobra demasiado optimista, confiaron en que las patrullas se iban a terminar marchando de lugar. Hubo hasta cambio de turno a las puertas del bar. A las siete y media de la mañana del sábado decidieron salir
|
etiquetas: valladolid , cierre , bar , covid