Cuando supe que se había rechazado la ley Sinde, escribí en mi Twitter que con respecto a esto y en esta ocasión, algunos políticos habían actuado de forma cobarde e hipócrita; lo mantengo. Inmediatamente empecé a recibir vía Twitter toda clase de insultos e improperios. Algunos incluso se atrevían a afirmar que no pago impuestos, otros simplemente me espetaban que currara, en fin los típicos argumentos del pendenciero de paso de cebra.
|
etiquetas: sanz , país