Zygmunt Bauman, afirmaba al respecto del movimiento de “los indignados” que “El 15-M es emocional, le falta pensamiento”. Una observación, a mi juicio, acertada, pero cuya aplicación se queda muy corta y debería hacerse extensiva a una gran mayoría de ciudadanos que son presa de los sentimientos más primarios, como la simpatía o la antipatía, la afinidad o el antagonismo, la envidia o la arrogancia. Lo cual les convierte en seres fácilmente manipulables y al servicio, aún sin saberlo, de los intereses políticos.
|
etiquetas: pardidos , bipartidismo , partidocracia , democracia , ley electoral , 15m